Alcanzar el equilibrio adecuado entre disponibilidad de productos y costos de almacenamiento. Comenzamos por realizar un análisis exhaustivo de la demanda histórica, considerando factores estacionales y tendencias del mercado.

A continuación, aplicamos técnicas de pronóstico avanzadas y modelos de inventario para determinar los niveles óptimos de stock para cada producto. Utilizamos criterios como el nivel de servicio deseado, plazos de entrega, lead time y costos asociados.

Además, implementamos estrategias de clasificación ABC para priorizar los productos de acuerdo con su importancia y valor. Asimismo, monitorizamos de cerca las métricas de rotación de inventario y realizamos ajustes periódicos para mantener un stock óptimo en todo momento.

Con esta metodología, logramos reducir costos de almacenamiento, minimizar la obsolescencia y mejorar la satisfacción del cliente al garantizar disponibilidad de productos cuando más se necesitan.